Ocupado...

Decir que estoy ocupado es poco. Estoy a dos días de entregar aquel proyecto hecho en PHP y MYSQL, dando las últimas pinceladas al documento y pensando en qué podría haber cambiado.

Es curioso cómo, cuanto más cerca estás de entregar algo, más dudas surgen sobre lo correcto que es, lo bien (o mal) que funcionará y las cosas que se debieron hacer de otra manera.
Ahora me enfrentaría al proyecto desde otra perspectiva, haría las cosas en otro orden, dejaría para el final algunas que hice al principio. Supongo que es normal, pero tratándose éste del primer proyecto serio al que me enfrento desde esta posición (la cual es una posición dominante, el proyecto depende por completo de mí y de mi amiga -y "cotrabajadora"-) y las dudas son ilimitadas.

¿El PHP está bien construido? ¿el diseño será consistente en el mayor número de navegadores posibles? ¿...? docenas de incógnitas que tienen docenas de respuestas cada una. Es cierto que hay pruebas, comprobaciones, tests, análisis y mil procedimientos para asegurar que el trabajo está bien hecho, pero siempre existe ese momento dubitativo final, cuando hay que dar carpetazo, ser consciente de que ese proyecto está terminado, ese código no se va a volver a tocar, esa idea para mejorar algo no se llevará a la práctica porque "se acabó".

Trato de resolver las dudas que van saliendo de una forma práctica, me digo "si funciona, si lo has probado y funciona, entonces está bien". Creo que finalmente es la última respuesta. Si funciona, está bien. Punto.

Es en este momento cuando de verdad sirven esas tediosas transparencias con "mejores prácticas", esas guías, tutoriales, apuntes, videos incluso anécdotas divertidas de torpezas frente a un teclado. El caso es que sólo sirven de apoyo, porque una vez más, si funciona, funciona, pero dan esa inyección de confianza que se necesita bastante a menudo.

Hay mucho que habría hecho de forma diferente de haber empezado hoy, pero el trabajo está hecho y funcionando. Que pase el siguiente.